Eduardo Galeano: «Los malos ejemplos de Cuba»

Raúl Antonio Capote

La Revolución cubana acaba de cumplir 55 años. Y sigue siendo uno de los procesos políticos más atacados y calumniados. El escritor uruguayo explicaba el porqué.

«En un mundo donde el servilismo es alta virtud, resulta raro escuchar la voz de la dignidad que representa Cuba. Esta revolución, castigada, bloqueada, calumniada, ha hecho bastante menos de lo que quería pero mucho más de lo que podía. Y sigue cometiendo la peligrosa locura de creer que los seres humanos no están condenados a la humillación de los poderosos del mundo.»

Son los «malos ejemplos» que ofrece la causa de tantas calumnias y campañas mediáticas.

Cuba, por ejemplo, luchó junto a los movimientos de liberación de los pueblos de África, mientras los que hoy la calumnian apoyaban a dictadores y sostenían el apartheid.

Miles de médicos de la Isla han salvado vidas en decenas de países del Tercer Mundo, mientras quienes hoy la calumnian envían a estos países sus tanques y marines.

Gracias a la solidaridad de Cuba -y también de Venezuela– más de tres millones y medio de personas han recuperado la visión en 34 países de Latinoamérica, el Caribe y África. Y han sido alfabetizadas casi 8 millones en 29 países.

En las cubanas, además, se han formado gratis más de 21 mil de 122 naciones, incluidos los EEUU, sin pedir absolutamente nada a cambio.

Y es que, como dijera también Eduardo Galeano, «la Revolución cubana, obra de este mundo, está sucia de barro humano, y justamente por eso, sigue siendo contagiosa».

Esa capacidad de contagio es lo que, definitivamente, no soportan quienes dirigen los centros de poder económico y político, y sus medios de propaganda. Que sigan sufriendo otros 55 años.

Fuente: El adversario cubano

Comentarios

Comentarios cerrados